domingo, 14 de septiembre de 2014

Arda lleva al Atléti a la victoria en el Bernabeu



El Atléti vuelve a salir con los tres puntos en la mochila del Bernabeu. Fue un partido táctico de ajedrez. Sufrido y con recompensa final. Los del Cholo lo tienen claro. Saben cuál es la fórmula y la ejecutan como si lo llevaran haciendo desde los tres años. El Atléti hizo dos cosas que el Madrid no hizo; trabajar y correr.

Comencemos por el principio. Todo empezó con un ritmo muy lento. Nadie quería que pasara nada. Incluso parecía que había respeto tras los partidos de hace unas semanas en la Supercopa de España. Esto sólo lo podía romper una jugada. Así fue.

Saque de esquina a favor del Atléti. Peligro. Lo ejecuta Koke al primer palo. Debe ser la cuadragésima vez. El canterano la pone donde quería y Tiago remata a la red. Jugadas de estrategia del Cholo y el Mono, capítulo 5493.

Parecía que sería otro partido. Pero no. Un error en la ayuda defensiva a Siqueira provoca que el brasileño se meta en el área, Cristiano lo ve y amaga, sale por un lado y Siqueira saca la pierna y le hace penalti. Muy claro. Empataba el Madrid. Llegaron los peores momentos. Se sufrió mucho. Los blancos metieron al Atléti en su área.

Pero ante estas embestidas, emergió un nombre. Moyá. Sacó una mano a Bale en una falta y sobre todo un paradón a bocajarro, tras remate picado de Pepe. La mejor noticia es que llegó el descanso. Tras la reanudación, el Madrid comenzó bien, siguiendo la estela de la primera parte. El Atléti se metía muy atrás, pero los blancos no aprovechaban su dominio.

Llegó el momento de la verdad. El Mono, a instancias del Cholo, saca a Arda Turan por Gabi. Era un cambio para ganar. Se notó que un mago estaba en el césped a los escasos segundos. Pidió el balón para él. El Mono sacó a Griezmann por Raúl Jiménez. Dos cambios que proponían sólo una cosa. Ganar. Cholo olió la sangre del rival y pensó en eso de "aquí estoy yo".

La magia del chico de la barba se notó de forma instantánea. Una apertura de Griezmann al piquito derecho del área grande del Madrid, Arda controló, amagó, buscó el hueco y disparó. Su lanzamiento se va por muy poco. Primer aviso. Arda tuvo otra tras un gran centro de Juanfran que sale fuera. Segundo aviso. 
Y llegó el momento del Ardaturanismo. Saque de banda para el Atléti. Griezmann filtra a Juanfran, que pone un balón de ensueño a Raúl García, que la deja pasar con inteligencia y Arda dispara muy ajustado a la cepa del palo de Casillas –que fue pitado por su propio público-. El mago había culminado una actuación magistral. Este Atléti necesita a Arda. ¡Cuánto le hemos echado de menos!

Los minutos finales fueron un quiero y no puedo del Madrid. También un no sé cómo. Y con un silencio sepulcral en el Bernabeu -roto por los cánticos de los 200 rojiblancos que fueron al campo del eterno rival- llegó una nueva victoria del Atléti en territorio merengue. Trabajar y correr. Ese fue el plan. No reconocer lo que está haciendo este Atléti descubre las vergüenzas de algunos.

Merece mencionar, por supuesto, la labor de Mateu Lahoz de hoy. Un arbitraje de nivel superior. Domina muy bien las facetas del juego. Todas. Desde ‘El Tridente de Neptuno’ queremos darle la enhorabuena por una magnífica dirección del partido.

Pero esta victoria del derbi la disfrutarán los aficionados porque el Atléti ya piensa en su primer partido de Champions de este martes. El partido a partido nos lleva a mirar a Atenas. Es un partido muy importante. Pero disfrutemos de la victoria en el Bernabeu, otra vez.

¡COMENTA  PARTICIPA CON NOSOTROS! ¡DANOS TÚ OPINIÓN SOBRE EL DERBI!

1 comentario:

  1. Tres simples puntos. Pero con sabor a gloria. Y con mucho esfuerzo y trabajo como tú bien dices. Coincido plenamente contigo en que, después del error de Siqueira en el penalty a Cristiano, nos salvó Moyá. Titularísimo, al menos para mí, a partir de ahora. No puedo explicarte con palabras cómo sufrí en la primera parte. Sabía desde el minuto 1 que juntando más las líneas con un 4-2-3-1 y poniendo un poco más de calidad en el medio (en el banquillo de suplentes había calidad a raudales), podíamos darles un soberano repaso... Y al final así fue. Pero viendo que se tardaba demasiado en tomar estas decisiones que yo veía fundamentales, sencillas y completamente lógicas, la primera hora de partido sufrí lo indecible. Me gustaría que si tienes unos minutos leyeras mis tweets del principio de la segunda hasta el final para que no pienses que hablo a toro pasado ni que soy ventajista. Y para que veas cómo pasé de la desesperación absoluta y al éxtasis y el júbilo. Algo muy frecuente y que a todos nos ha pasado. Estoy contigo. Disfrutemos al máximo.. Nos lo merecíamos Fran.

    ResponderEliminar