Arbitraje plácido del gallego, Ignacio Iglesias Villanueva. Ambos equipos se lo pusieron muy fácil. Pocas tarjetas, sin polémica y encuentro muy bien dirigido.
El colegiado gallego mostró cinco tarjetas amarillas. Sólo una para los rojiblancos, que la vio Luciano Vietto por discutir con un contrario sin amenazas ni insultos. Las otras cuatro fueron para jugadores 'amarillos'; Hernán por saltar con el codo abierto e impactar en un jugador colchonero, Bigas por agarrar a un rival, Fabio González por discutir con un rival (Vietto) y Jonatan Viera por protestar.
La jugada más importante fue el penalti a diez minutos del final en contra del Atlético. Gabi, se equivoca, y zancadillea a un rival. Llega tarde y le derriba. Acertó el trencilla.
El público del estadio de Gran Canaria estuvo muy enfadado con el árbitro por diversas faltas de los jugadores del Atlético. Pero nada más lejos de la realidad. Es más, fue un arbitraje muy inglés y bien dirigido. La única pega al trencilla sería que Saúl pudo haber visto la amarilla por sujetar a un rival.
Nota: 9 Sobresaliente bajo
No hay comentarios:
Publicar un comentario